La deambulación es uno de los problemas más importantes que deben enfrentar quienes cuidan a personas con Alzheimer. Este comportamiento las coloca ante el riesgo de lesiones graves o fatales. La deambulación se da cuando una persona con Alzheimer deja su casa o el área que habita sin la supervisión y el conocimiento de la persona que la cuida. Alrededor de 6 de cada 10 personas con Alzheimer deambulan en algún momento, muchas de ellas repetidas veces. Existen muchas razones para que la persona con Alzheimer deambule. Por ejemplo, la persona puede:
Estar tratando de realizar una antigua actividad o responsabilidad, como cuidar a un hijo o ir a trabajar
Estar tratando de dejar un ambiente extraño o nuevo
Estar tratando de reducir el estrés causado por la soledad, el ruido o la muchedumbre
Ser incapaz de reconocer lugares familiares o personas conocidas
Estar impaciente debido a una escasa o nula actividad física
Estar atemorizada ante sonidos e imágenes desconocidos
Estar experimentando efectos secundarios de medicamentos que le causen confusión e inquietud
Estar buscando algo en particular como comida, el baño o a una persona
Para ayudar a prevenir deambulación hay que asegurarse de que la persona tenga actividad física y mental todo el día. Las actividades pueden incluir ayudar en las tareas domésticas o salir a caminar.
Consejos para prevenir la deambulación
Los siguientes consejos pueden ayudarlo a prevenir la deambulación de la persona con Alzheimer o le ayudarán a localizarla de manera más fácil en caso de que deambule:
Asegúrese de que la persona con Alzheimer lleve consigo algún tipo de identificación o un brazalete médico. Si la pesona deambula y no se puede comunicar, esto le indicará a los demás quién es la persona y qué condición médica padece.
Los collares o brazaletes de identidad son muy útiles. El collar o brazalete posee una medalla que contiene una identificación con foto en el interior.
Tenga disponible una foto o video actual de la persona con Alzheimer. Esto será de gran ayuda cuando traten de localizar a la persona.
Mantenga las puertas cerradas con llave. Coloque cerraduras de seguridad en todas las puertas que dan al exterior de la casa. Idealmente, para abrir una puerta se deberán realizar 3 pasos: buscar la llave, llevar la llave hasta la puerta y abrir la puerta. Cuanto más pasos haya para abrir la puerta, menos posibilidades habrá de que la persona pueda hacerlo. Considere también trasladar las cerraduras a la parte superior de la puerta y fuera del alcance de la persona.
Instale dispositivos de alarma que le indiquen si la persona con Alzheimer está deambulando. Las campanitas o chicharras eléctricas pueden indicar cuando se abre una puerta. En las puertas junto a la cama se pueden colocar tapetes sensibles a la presión que activan una alarma cuando la persona se mueve.
Considere colocar una verja alrededor del patio. Las verjas que tengan puertas con cerradura reducirán las posibilidades de que la persona con Alzheimer abandone la propiedad.
[tomado de: En esto juntos, publicación de Forest Pharmaceuticals, Inc., 2004]